viernes, 25 de julio de 2014

Capitulos 43º 44º 45º y 46º

CAP 43.-
Tom: Más o menos.
Tu: A mí tampoco me gustaría eso.
Tom: Gracias -le apretó los senos disfrutando de su suavidad antes de frotarle los pezones hasta convertirlos en duras crestas oscuras-. Tendré cuidado.
Tu: Ya lo sé -cerró los ojos y se arqueó bajo su caricia-. ¡Oh, Tom! Podría hacerme adicta a tus caricias.

Él se detuvo sin saber qué decir.

Tom: Tenemos todo el verano.

_____ abrió los ojos despacio y la excitación brilló en lo más profundo de ellos.

Tu: ¿Nos atreveremos a arriesgarnos? ¿A hacer el amor durante todo el verano?

Por supuesto que él se arriesgaría, pero no quería presionarla a algo de lo que después pudiera arrepentirse.

Tom: Eso depende de ti. Es tu proyecto. Dijiste que lo único que necesitabas era que te desfloraran.
Tu: Eso era cuando creía que... sería con otra persona. Hum. ¡Qué gusto, Tom!

Él le frotó el otro pezón entre el pulgar y el índice.

Tom: Cuanto más hagamos el amor más posibilidades habrá de que alguien nos descubra.
Tu: Huff... Sí -_____ cerró los ojos de nuevo y se humedeció los labios con la lengua-. Deberíamos pensarlo.
Tom: Pues piénsalo -dijo inclinándose para meterse un pezón en la boca.

Ella suspiró y se arqueó hacia arriba animándole a que tomara más.

Tu: ¡Claro! Mientras me vuelves loca.

Tom hizo todo lo posible por conseguir exactamente eso mientras se introducía su pecho aún más en la boca antes de volver al otro seno.

Tom: No tienes por qué decidirlo ahora -murmuró contra su piel mientras deslizaba la mano hacia el triángulo entre sus piernas.
Tu: Eso está bien -inspiró con fuerza cuando él introdujo los dedos entre sus rizos hasta llegar al punto más sensible- Y eso mejor.

Acariciarla ahora tenía un nuevo significado, porque ahora, por fin, sabría lo que era sentirse dentro de ella. La sangre le ardió mientras la acariciaba preparándola para la dulce invasión. Y él sería el primero. Que Dios le ayudara, estaba invadido de júbilo ante la idea.
_____ sintió el cambio en las caricias de Tom, como si la promesa de la plenitud le diera una nueva urgencia. Y aunque intentó parecer natural ante lo que iba a suceder, se sentía como una canoa zarandeada en los rápidos hacia la cascada. Si otro que no hubiera sido Tom la estuviera tocando así, se habría levantado de la cama en el acto.
Pero era Tom el que estaba allí, haciéndola desear la firme intrusión de su cuerpo en lo más profundo de ella. Quizá le doliera. Ya no le importaba siempre que por fin la poseyera y la llenara en formas que no había soñado hasta aquel momento.
Tom alzó la cabeza con gesto interrogante mientras deslizaba un dedo dentro de ella.
Era la penetración por la que se moría de ganas, pero no suficiente. Sintió una repentina timidez que le hizo cerrar los ojos antes de pedir lo que deseaba.

Tu: Más -susurró.

Tom introdujo entonces dos dedos sin dejar de darle suaves besos en la boca.

Tom: Dime cómo lo sientes.
Tu: Diferente -contuvo el aliento cuando él introdujo más los dedos-. De maravilla -dijo con un suspiro tembloroso-. Tom, me estás volviendo loca por dentro. Desflórame ya, por favor.

CAP 44.-
Su beso fue suave mientras se deslizaba entre sus muslos y apoyaba los dos brazos a ambos lados de su cabeza. Temblando de excitación, _____ enroscó los dos brazos alrededor de su cuello y notó que él también estaba temblando.

Tom: _____ -susurró él-. Abre los ojos.

Ella lo miró asombrada de la ternura que encontró en su mirada. Hubiera creído que un hombre en su situación parecería mucho más fiero.

Tu: ¿Qué?
Tom: Voy a ir despacio. No tienes que apretar la mandíbula de esa manera. Y mantén los ojos abiertos. Si me miras, podré decirte lo que estoy haciendo.
Tu: ¿Cómo puedes estar... tan calmado?
Tom: Créeme, no estoy calmado, sólo tengo cuidado
Tu: ¡Oh, Tom! Gracias por estar aquí.

_____ notó el destello de deseo incontrolado en sus ojos antes de quedar absorta por completo en la sensación cuando la penetró. Notó su calor y tamaño. Él se retiró y volvió a entrar y ella gimió de placer ante aquella fricción que no se parecía a nada que hubiera conocido.

Tom: ¿_____?
Tu: Ha sido un gemido de felicidad -murmuró mirándolo a los ojos

Tom tenía la respiración jadeante, pero mantuvo los movimientos lentos.

Tom: Voy a penetrar un poco más.
Tu: Sí.

Todo lo demás, comprendió _____, por muy delicioso que hubiera sido, iba encaminado sólo a aquello, a la última conexión. Nada en el mundo le había parecido tan perfecto como abrir su cuerpo a aquel hombre y ser llenada por él.
Tom se deslizó aún más adentro y encontró resistencia. Se detuvo al instante y la miró a los ojos.

Tom: Ahí está.

_____ tenía el corazón desbocado. Un movimiento y su vida habría cambiado para siempre. Ya no sería virgen y conocería la maravilla de estar unida íntimamente a otra persona. Y no a una persona cualquiera, sino a Tom. Un movimiento más y ella sería una con él en todo el sentido de la palabra.
_____ deslizó las manos hacia sus nalgas y se las apretó con firmeza.

Tu: Vamos por ello.

Mientras él empujaba con suavidad al principio, ella se alzó para recibirlo, resuelta a compartir aquel momento. El agudo dolor la hizo lanzar un grito.

Tom: ¡Maldición! -exclamó deteniéndose en el acto.
Tu: Está bien -tembló contra él-. Ya se me está pasando. No te retires. Ya se ha pasado. Ámame. Ámame como un hombre ama a una mujer.

Con un bramido, Tom embistió hasta dentro y la fiereza que ella había esperado ver antes brilló en sus ojos cuando la miró.
Mientras ella le devolvía la mirada, una fiera intensidad ardía dentro de su cuerpo. Había esperado estar desnudos los dos esa noche, pero no había adivinado que la despojara de la esencia misma de su alma y ella a él. Lo miró a los ojos y comprendió que los dos estaban viendo profundidades que nunca había imaginado. Y su mundo se trastocó porque supo que la conexión que estaban haciendo no duraría sólo esa noche, ni siquiera el verano, porque duraría para siempre.

CAP 45.-
«Perfecto», pensó Tom. Él nunca había estado con nadie con quien se hubiera sentido tan cercano como con _____ en aquel momento. Le pareció que todas sus vidas habían estado encaminadas a aquel momento. Unidos de espíritu desde que eran niños, por fin habían creado la última unión y sintió que siempre habían estado destinados a ello.
Pensando en ella, se movió con cuidado, pero sintiendo la perfección que encarnaban juntos.

Tom: ¿Estás bien? -murmuró
Tu: Muy... muy bien.

Los ojos le brillaron
Tom se retiró y avanzó de nuevo. Sí. Y otra vez más.

Tom: Oh. _____!
Tu: Tom... Tom.

El asombro en sus ojos y la riqueza con que pronunció su nombre era todo lo que necesitaba saber. _____ estaba con él. Tom deslizó una mano tras sus nalgas y la mantuvo firme mientras transmitía un ritmo más apremiante. Ella lo siguió con rapidez, acompasándose a sus embestidas. Su trasero era suave y al notar la flexión de sus músculos bajo su palma supo que ella había empezado a participar para volverlo loco.
Muy loco. Pronto. Tom cambió el ángulo para rozarle los senos con su torso y apretar el botón sensible entre sus muslos para que llegara con él.
La respiración de ella se hizo jadeante y supo que había encontrado el punto y que debía aguantar todavía un poco. Esa primera vez quería darle el regalo de saber lo bueno que podía ser, las alturas que podría escalar con él dentro de ella.
Los ojos de ella se abrieron y la respiración se desbocó. Aquella respuesta aceleró la de Tom. Nunca hubiera creído que hacer el amor podría ser así. El cuerpo de _____ se arqueó para recibir sus embates apretándose alrededor de él. Cuando en los ojos de ella vio que se acercaba el momento, Tom lanzó una carcajada exultante.

Tom: ¡Sí! -gritó.
Tu: ¡Oh, Tom! -se arqueó contra él-, Estoy......
Tom: Sí -bramó él con voz ronca de deseo-. Ahora eres una mujer.

«Mi mujer», pensó.
Con una embestida final consiguió que el paraíso lloviera sobre ellos.

_____ permaneció tendida en las almohadas al lado de Tom con la bandeja sobre un cojín mientras picaban los aperitivos que había preparado. Tom estaba comiendo con apetito, pero ella había perdido interés por la comida.
Miró a Tom por centésima vez con una sonrisa.

Tu: Lo hemos hecho muy bien, ¿verdad?

Él se quedó con el melocotón a medio camino de la boca y la miró.

Tom: Sí. Tú también pareces muy contenta contigo misma.
Tu: Lo estoy -agarró un racimo de uvas negras y se metió una en la boca-. Estoy orgullosa de nosotros. Creo que hemos sido fantásticos. Mucho mejor de lo que hubiera esperado.

Después de tragar un trozo de melocotón, Tom hizo un gesto a su alrededor.

Tom: No lo sé. Mirando todo esto, yo diría que esperabas mucho.
Tu: Los libros dicen que el hombre es un animal visual y yo intentaba asegurarme que te excitaras a conciencia. Quizá si me hubieras visto con unos pantalones conos y una camiseta no lo hubiera conseguido.

Tom lanzó una carcajada tan fuerte que casi se atragantó.

Tom: _____, ya tenía una erección de camino aquí sólo con pensar en lo que íbamos a hacer.
Tu: ¿Sí? -ella sonrió-. ¿Así que lo del teléfono funcionó?
Tom: ¡Sabía que lo habías hecho a propósito!
Tu: Por supuesto. Igual que hiciste tú lo de los guantes.
Tom: Y tú me dejaste aquel mensaje insinuante en el contestador. Casi se me caen las maletas cuando oí lo del hielo delante de mi madre.
Tu: Bueno, no quería que perdieras el interés.
Tom: No creo que hubiera podido.
Tu: En serio, Tom. Según lo que he leído, las mujeres mantienen con más facilidad los sentimientos de pasión en la distancia mientras que los hombres son más de: "ojos que no ven, corazón que no siente". No quería que perdieras el interés.

CAP 46.-

Tom: Para tu información, no había posibilidad de que lo perdiera. No necesitaba aquella conversación telefónica o la insinuación del hielo para estar excitado.
Tu: ¡Oh! ¡Se me olvidó lo del hielo! Pensaba hacerte algunas cosas especiales con ese truco, pero estaba tan excitada que se me olvidó.
Tom: Lo tomaré como un cumplido.

El corazón le latió un poco más fuerte al recordar la gloria de su unión con él y sus almas fundidas.

Tu: Es un cumplido. Sólo podía pensar en lo que estaba pasando entre nosotros -lo miró a los ojos y el ardor le invadió las partes secretas de nuevo-. Supongo que no necesitábamos el hielo
Tom: No, sólo nos necesitábamos el uno a otro.

Incluso ahora, _____ apenas podía creer que él la hubiera deseado de verdad.

Tu: Esto es tan nuevo... ¿O sea que te has sentido excitado de verdad por mí, la chica a la que conoces de toda la vida?
Tom: Uh, uh.
Tu: ¡Uau!
Tom: De hecho, me estoy excitando otra vez.

Y también ella, aunque no quería reconocerlo.

Tu: Pensé que los hombres tardaban un poco en recuperarse.
Tom: Ya ha pasado un poco.
Tu: No mucho. Según dicen los expertos, un hombre necesita cierta estimulación antes de empezar otro episodio.

Tom lanzó una carcajada.

Tom: Esas lecturas te pueden traer problemas. Acepta mi palabra. Yo conseguiría hacerlo otra vez. Y quizá varias. Me gustaría quedarme aquí y hacerte el amor toda la noche, pero no sé cómo explicaría que mi furgoneta estuviera aparcada frente a tu casa hasta el amanecer -_____ miró el reloj y lanzó un suspiro de pesar-. Y además, necesito que contestes antes a mi pregunta.
Tu: ¿Qué pregunta?

Tom la miró con intensidad.

Tom: Bueno, ya no eres virgen.
Tu: No. ¿Y qué?
Tom: Que tu proyecto de verano ya está cumplido ¿no es cierto?

A _____ se le contrajo el estómago con repentina ansiedad.

Tu: ¿Quieres decir que podríamos parar aquí y... nunca más hacer el amor?
Tom: Eso es lo que quiero decir. Necesito saber si esto es el final o no.
Tu: ¿Que es lo que tú quieres?

El esbozó una lenta sonrisa e hizo un gesto en dirección a su miembro.

Tom: Creo que eso es evidente.
Tu: Estoy hablando de los riesgos a largo plazo.

Pero mientras lo decía, se preguntó si ella misma entendía aquel término. Hasta el momento se había preocupado por sus familias y los cotilleos del pueblo, pero después de lo de anoche se sentía unida a Tom de una forma diferente y, sin embargo, tendría que romper aquel lazo al final del verano. Y cuanto más hicieran el amor, más difícil sería romperlo.

Tom: Yo estoy deseando correr los riesgos a largo plazo -anunció despacio.
Tu: ¿Y seguiríamos... siendo amigos?
Tom: Siempre seremos amigos.

Tom estaba magnifico allí de pie, pensó _____. Ninguna mujer en su sano juicio rechazaría a un macho como aquel.




HOLA!!! BUENO ... POR FIN YA LO HICIERON :D ---- LO QUE TANTO ESPERABAN USTEDES, BUENO QUE CREEN Q PASE DE AHOR EN ADELANTE? CREEN QUE SEGUIRAN CON SUS QUEVERES O TERMINARA AHI?? ESO LO SABRAN EN LOS PROXIMOS CAPS ... BUENO SIN MAS QUE DECIR ME DESPIDO, QUE ESTEN BIEN Y YA SABEN 2 O MAS COMENTARIOS Y AGREGO SINO NO ... ADIOS :))

2 comentarios:

  1. *.* unidos por siempreee!!
    Muero por saber que pasará??!!

    Subeeee.. Sufriran? Seguiran viendoseeee?? ..

    Subeee !!

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  2. :O me encantoooooooo :) si el cap q tanto esperaba, yo también me muero x saber q pasara, sufrirán?? seguirán viéndose a escondidas?? ella se ira a New York?? estoy muy intrigada espero los próximos caps virgiii!!!! pásate x mi fic, darknesslight-fanfic.blogspot.com

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